Hacer que las Naciones Unidas sean relevantes para todas las personas– Como Pronunciado –
INTERVENCIÓN DE LA PRESIDENTA DEL 73º PERIODO DE SESIONES DE LA ASAMBLEA GENERAL, S.E. MARIA FERNANDA ESPINOSA
19 de febrero 2019
Excelencias, Damas y Caballeros:
Es un honor dar la más cordial bienvenida a los alcaldes de Quito, Nairobi, Praia y Valencia, a la Alcaldesa de Surabaya, a la Comisionada de Asuntos Internacionales de la Ciudad de Nueva York, así como a la Secretaria General de la Ciudades Unidas y Gobiernos Locales, y a la Profesora de Investigación Urbana y Educación de la Universidad de Pennsylvania.
Su presencia contribuirá a potenciar el rol creciente de los Gobiernos Locales en el cumplimiento de las Agendas Globales, en particular la Agenda 2030.
Me complace también compartir este podio con mi amigo, el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, a quien agradezco su apoyo extraordinario en la organización de este evento, al igual que a la Señora Maimunah Mohd Sharif, Directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos, quien también se ha sumado a esta iniciativa.
Excelencias:
La urbanización es la fuerza dominante del Siglo XXI. En los últimos años, hemos sido testigos del crecimiento exponencial de los centros urbanos. Actualmente, más del del 55 por ciento de la población mundial es urbana y para el año 2050 alcanzará el 68 por ciento, lo que las convierte en actores centrales de la economía global y del desarrollo.
Las ciudades enfrentan desafíos comunes que requieren de soluciones globales, y para superarlos las urbes desarrollan cada vez más una “diplomacia de ciudades”, constituida en redes. Pero también el desarrollo sostenible de las ciudades es parte de la agenda de las Naciones Unidas.
Al respecto destacaré cuatro elementos que considero relevantes en este diálogo:
En primer lugar, con el Objetivo 11 de la Agenda 2030 los Gobiernos locales están directamente vinculados en los esfuerzos para lograr que “las ciudades y asentamientos urbanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles”. Al mismo tiempo, inciden en la capacidad de cumplimiento del resto de los Objetivos de la Agenda.
Es alentador observar algunos ejemplos donde los Alcaldes han asumido la implementación de la Agenda 2030 como parte de sus planes de desarrollo y en su planificación urbana. Destaco Nueva York, esta hermosa ciudad que acoge la sede de nuestra Organización, y que fue la primera en el mundo en informar sobre los progresos realizados para el cumplimiento de las metas de la Agenda 2030 en el Foro Político de Alto Nivel de julio pasado, lo que demuestra su compromiso con esta agenda global.
En segundo lugar, la Nueva Agenda Urbana, acordada en la Conferencia sobre Vivienda y Desarrollo Sostenible, Hábitat III, celebrada en Quito, fue otro gran logro del multilateralismo.
La Nueva Agenda Urbana significó un cambio de paradigma, que presenta una hoja de ruta de largo aliento para el desarrollo urbano transformador, sustentable e inclusivo, bajo el principio central de que nadie se quede atrás. Este acuerdo constituye el vínculo principal entre nuestra Organización y los Gobiernos locales.
Por primera vez, los Gobiernos locales participaron en la construcción de una declaración de las Naciones Unidas en materia de desarrollo urbano sostenible, lo que demuestra la apertura de nuestra Organización para escuchar e incluir la voz y la guía de quienes toman decisiones de forma más cercana a la gente.
En tercer lugar, los Gobiernos locales tienen un papel protagónico en la consecución de los compromisos establecidos en el Acuerdo de París. Las ciudades impactan significativamente en el cambio climático. Se estima que los centros urbanos representan aproximadamente dos tercios de la demanda de energía primaria y producen el 70% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono.
Tener a más de la mitad de la población residiendo en estas áreas urbanas implica también mayor contaminación y degradación medioambiental.
La cantidad de residuos sólidos urbanos excede ampliamente la capacidad de la mayoría de las ciudades para gestionarlos. Esto genera un serio problema de sostenibilidad ambiental.
En este escenario, observamos con optimismo el compromiso de las autoridades de varias ciudades para reducir las emisiones de CO2 y mejorar la eficiencia energética. Frente a las dificultades que se enfrentan en el ámbito internacional, son los Gobiernos locales los que han asumido los liderazgos necesarios para impulsar esta importante agenda.
La Reunión de Alto Nivel sobre el Clima y el Desarrollo Sostenible para Todos, que se celebrará el 28 de marzo, y la Cumbre de Acción Climática, del próximo 23 de septiembre, también nos ofrecerán la oportunidad de abordar el papel de las ciudades, a plenitud.
En cuarto lugar, me complace que en esta sesión abordemos los esfuerzos que, de manera coordinada, realizan los Alcaldes de varias ciudades, incluyendo los aquí presentes, con el apoyo de la FAO, para alcanzar el Objetivo 2 de la Agenda 2030, que busca acabar con el hambre y garantizar la seguridad alimentaria, combatir la malnutrición y el desperdicio de alimentos. Esta es, sin duda, una iniciativa crucial.
Nos complace el fortalecimiento del trabajo de redes de Gobiernos locales como CGLU, o nuevas iniciativas como Urban 20, que, en conexión con importantes líderes mundiales, demuestran que la voz de las ciudades es cada vez más escuchada, y valorada para el diseño de agendas globales y la ejecución de los ODS, los Acuerdos de Paris y la Nueva Agenda Urbana a nivel local, como aporte fundamental para resolver los retos más importantes que enfrenta el planeta en la actualidad.
En síntesis, la relación entre cambio climático, seguridad alimentaria y la acción urbana es central para el cumplimiento de la Agenda 2030 y esto es lo que anima este espacio de diálogo e intercambio.
¿Cuál es el vínculo entre la ciudad, el espacio periurbano y el campo? ¿Cómo fomentar la disponibilidad de alimentos nutritivos para todos en todas las etapas de la vida? ¿Cómo fomentamos canales de comercialización y distribución eficiente, y enfrentamos a la vez el reto -para la salud pública- de los alimentos ultra procesados?
La urbanización es la fuerza dominante del Siglo XXI. En los últimos años, hemos sido testigos del crecimiento exponencial de los centros urbanos. Actualmente, más del del 55 por ciento de la población mundial es urbana y para el año 2050 alcanzará el 68 por ciento, lo que las convierte en actores centrales de la economía global y del desarrollo.
Excelencias, amigas y amigos:
Continuemos generando una mayor sinergia con los Alcaldes y Gobiernos locales para darle contenido y aplicación a los compromisos adoptados; ellos son capaces de traducir el trabajo normativo y de diseño de políticas de nuestra Asamblea General a prácticas y respuestas locales que tienen impacto directo en la vida de las personas y acercan la ONU a la gente a la que servimos, para hacerla más relevante.
Un futuro mejor para todos, más sostenible e incluyente es posible, si optimizamos las relaciones y la coordinación entre los Gobiernos Nacionales y los Gobiernos locales. Los Gobiernos locales pueden y deben ser agentes de las transformaciones que requerimos.
Espero que este intercambio sea fructífero y nos permita potenciar el aporte de las ciudades a la agenda de nuestra Organización.
Muchas gracias.
