Emma sobrevivió a la tortura durante el conflicto interno de su país. Antes de huir a Costa Rica, enfrentó violentos interrogatorios, violaciones y el secuestro de su hermano. A pesar de todo, luchó por la verdad y la justicia. Un empeño que llevo a un tribunal a condenar a los perpetradores de su tortura y la desaparición de su hermano. El Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura (26 de junio) conmemora dramas como el de Emma.
Tortura y otros tratos crueles
Tras su liberación, Riyad Avlar, superviviente de tortura y violencia sexual en centros de detención sirios, encontró cura a través del teatro. “Nunca imaginé que algún día subiría a un escenario, pero cuando lo hice sentí una gran recuperación”, cuenta Alvar, encargado de una organización de supervivientes en Turquía. Alvar ha hablado con el Fondo Voluntario de la ONU para Víctimas de la Tortura. Un programa que, a pesar de apoyar a más de 50.000 de estas víctimas, está pasando por una crisis de financiación.
El Secretario General de la ONU nos recuerda que la tortura representa una “violación atroz de los derechos humanos” que se sigue aplicando en muchos países, incluso donde está tipificada como delito.
La erradicación de la tortura fue uno de los principales desafíos a los que se enfrentaron las Naciones Unidas nada más fundarse. Su lucha culminó con la adopción de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes. Para garantizar su cumplimiento, el Comité contra la Tortura evalua periódicamente las medidas que están tomando los países firmantes de la Convención para erradicar esta práctica en su territorio. La próxima cita, a celebrar en Ginebra, tendrá lugar del 11 de noviembre al 6 de diciembre.