Lucha contra la financiación del terrorismo

Represión de todas las formas de financiación del terrorismo

Debido al recrudecimiento de la amenaza terrorista de los últimos años y la evolución concurrente de las tipologías de financiamiento del terrorismo, el Consejo de Seguridad ha aprobado resoluciones adicionales, a menudo en virtud del Capítulo VII, para afrontar las formas de financiación del terrorismo, en particular centrándose en los nexos entre el terrorismo y los grupos de delincuencia organizada y enfrentando la captación de fondos mediante el secuestro a cambio de rescate. En la resolución 2462 (2019), el Consejo de Seguridad expresó su preocupación por el flujo de fondos recibidos por el terrorismo y la necesidad de reprimir todas sus formas de financiación.

Programas de lucha contra la financiación del terrorismo

En respuesta a la resolución 2462 (2019), la Oficina de las Naciones Unidas de Lucha contra el Terrorismo (OLCT) y sus asociados están fortaleciendo su capacidad para atender las solicitudes de asistencia técnica de los Estados interesados en la esfera de la lucha contra la financiación del terrorismo. Entre ellos se incluye una amplia gama de temas urgentes de la lucha contra la financiación del terrorismo, como la protección del sector de las organizaciones sin fines de lucro, el intercambio de inteligencia financiera, la promoción de alianzas público-privadas, la realización de evaluaciones de riesgos sectoriales y otras cuestiones prioritarias identificadas por el Grupo de Acción Financiera (GAFI) y los organismos regionales del estilo.

Es importante que las autoridades nacionales y los interesados pertinentes cuenten con la capacidad para combatir la financiación del terrorismo dentro de sus jurisdicciones y a nivel regional. Esto se fundamenta en el emblemático programa en curso de la OLCT para fomentar el desarrollo de la capacidad relativa a la designación de terroristas y la congelación de activos, que desde marzo de 2015 ha proporcionado asistencia técnica y capacitación a Estados Miembros (organismos reguladores regionales, unidades de inteligencia financiera, ministerios pertinentes e instituciones del sector privado) y órganos regionales para aplicar efectivamente las sanciones financieras selectivas contra el terrorismo y su financiación, y ha ayudado a los Estados Miembros y órganos regionales en la adopción de mecanismos para salvaguardar sus sistemas financieros y enfrentar las técnicas de financiación del terrorismo.